1. Formación, información y asesoramiento en inversión inmobiliaria.
Antes de realizar tu primer inversión inmobiliaria, es importante informarse para conocer en lo que se invierte, entenderlo y saber cómo funciona.
Lo primero que hay que hacer es mirar el panorama inmobiliario actual. ¿Los precios de los inmuebles suben o bajan? ¿Cuáles son los tipos de viviendas más demandados? ¿Es mejor comprar para vender, o alquilar?…
Informarte bien de la situación te ayudará a evitar cometer errores en el proceso de elección. En cualquier caso, siempre puedes acudir a un profesional para asesorarte y que te ayude a tomar la mejor decisión.
2. Objetiva los datos.
Aunque te formes e informes, no sabrás de todos los aspectos, y aun sabiéndolos, la subjetividad nos puede jugar una mala pasada, porque la ilusión del proyecto nos hará minimizar los riesgos. Por eso es imprescindible que hagas un DAFO/FODA de cada inversión.
Por ejemplo, en el caso de invertir en la compra de una vivienda para su posterior alquiler, una Fortaleza es que una vivienda es siempre necesaria, una Oportunidad es que hay alta demanda, una Debilidad, que tendrías que hacer una reforma, y una Amenaza, que los precios de alquiler se reduzcan por la crisis.
3. Fijar objetivos de inversión inmobiliaria.
Pregúntate… ¿Para qué quiero invertir? ¿Deseo tener más propiedades? ¿Quiero incrementar mis ingresos? ¿El objetivo de la inversión es de corto o largo plazo?
Tienes que fijar objetivos SMART:
Specifics, “Específicos”: ¿Cuánto dinero quiero ganar?
Mesurable, “Medible”: ¿Cuánto dinero gano cada mes?
Attainable, “Alcanzable”: Quiero ganar x€ en x tiempo
Relevant, “Relevante”: La inversión me dará una rentabilidad segura del x%
Timely, “Tiempo”: ¿Durante cuánto tiempo?
4. Planificar y controlar tu inversión inmobiliaria
A pesar de los pasos anteriores hay oportunidades y amenazas que pueden cambiar nuestra previsión, para aprovecharlas o mitigarlas tenemos la herramienta de control, de seguimiento de la evolución, ver si se desvía del objetivo fijado o no y actuar en consecuencia a tiempo.
Una forma de planificar el seguimiento es realizando un cuadro de acciones, que siguiendo el ejemplo anterior de la compra de un piso para alquilar, sería como este:
QUÉ (What)
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QUIÉN (Who) |
CÓMO (How) |
CUÁNDO (When) |
DÓNDE (Where)
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Determinar precio de compra. |
Tú + el asesor fiscal + asesor financiero + abogado. |
Calcular cuánto debes pagar en total, cuánto puedes pagar y cuánto necesitas financiar. |
Ya
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En los despachos de tres profesionales o en el de uno que lo coordine todo. |
Y así con todas las acciones a realizar, para planificar qué queremos y qué podemos comprar, y qué profesionales quieres que intervengan en este proceso. Marcas un responsable y un periodo concreto de desarrollo.
5. Pensar en vender o desinvertir
Cuando entramos en algún lugar nos solemos fijar en cómo salir. El mismo ejercicio tenemos que realizar cuando pensamos en invertir.
Cuando se invierte, se ha de prever la desinversión.
Si se compra una vivienda, es fácil pensar en qué pasará si se quiere vender. Si es buena zona, está bien comunicada y en expansión, será fácil volver a venderla, y seguramente a un precio más alto.
Y ¿si invertimos en un inmueble con más adquirentes?
Si bien las decisiones en una sociedad suelen ser por mayoría, cuando se es copropietario de algún bien con más propietarios, las decisiones se toman por unanimidad y la decisión de venta, alquiler o hipotecar el inmueble dependerá de la decisión de todos.
Estos son algunos de nuestros consejos para tu primera inversión, obtenidos de la experiencia de más de 30 años reorganizando patrimonios, obteniendo más rentabilidad y consiguiendo que nuestros clientes, a pesar de las crisis, sigan teniendo su nivel de vida y patrimonio mantenido e incrementado.
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